
En los valles verdes
de los Pirineos
cuando el hielo muere
y pasado está el frío gélido.
Tiñen de sangre roja
las amapolas al viento,
mezclado el verde lozano
de saberse nuevo.
y el encendido bermejo
de púrpuras enloqueciendo.
Baja de la cumbre
hilos de lluvia de plata
que el sol va deshaciendo
de las altas montañas
magnificado en cataratas.
Se llenan los ríos
y de estar adormecidos
fluyen rápidos, nítidos, fríos
y saltan las ranas
de hoja en hoja.
Los árboles se alegran
porque bostezan sus ramas;
¡ya ha llegado la primavera!
Se renueva la vida,
los campos, los árboles, las mariposas,
las flores y el ganado guardado
sale al encuentro
de lo que anda esperando.
Sintiéndome mariposa
levanto el vuelo
y voy planeando
con el sol de consuelo.
¡Es de tal magnitud lo que veo!
que la belleza estalla
en ese momento.
Y sigo alabando
con mis ojos abiertos.
Imposible cerrarlos;
es la hermosura en estado perfecto
lo que estoy viendo.
paky